(Sensación en imagen tras ver el espectáculo Nexo (s))
Hay muchas formas de bailar, de moverse, de expresar y contar con el cuerpo, y muchas formas también de llevar a escena esta expresión. Y como formas, también hay necesidades. La sala dt, junto con la sala labruck y nave 73, llevaron a cabo el festival, SOS Emergencia coreográfica, donde se daba espacio a creadores emergentes, para levantar una pieza unica.
Yo tuve oportunidad de ver Nexo (s) la pieza presentada en Nave 73, y sin ningún conocimiento acerca de porqué, para qué y qué querían contarme con la pieza me senté a ver como dos intérpretes me hablaban y comunicaban con cada parte de su cuerpo.
Las manos tienen su propio lenguaje cuando se las saca de su contexto normal, y se deja que hablen, cuenten, toquen y sientan de manera diferente, los pies, que caminan y recorren muchos caminos pueden también mostrarnos su cara más comunicativa, y precisa.
Cuando salí de ver el espectáculo tenía una mezcla de sensaciones extrañas en el cuerpo, había mucha precisión en lo que acababa de ver, como también mucha frescura, juventud y necesidad, si, necesidad. En algunos momentos de la pieza las intérpretes recorrían en un pequeño espacio de tiempo varios estados, emociones y sensaciones, como si tratasen de contar a los espectadores algo que tenía que salir ya, como digo una necesidad de expresar, algo contenido que tiene que explotar de alguna forma, pero que cuando lo hacía era en forma de movimientos, en la precisión de un dedo, en el movimiento de una oreja, o en la distancia entre la cabeza y los pies. Si tuviera que elegir algo con lo que quedarme la de función, sería con el camino de estados por los que me hicieron pasar al ver la función. Porque al pasar con ellos, en muchos momentos yo también sentí una necesidad que no se muy bien de dónde salía de explotar de esa forma con el movimiento.
El nombre del festival por otra parte, SOS Emergencia coreográfica, me hace pensar en el panorama actual. A nivel artístico, hay muchas puertas abiertas (por desgracia a veces abiertas a quien no lo sabe aprovechar), pero también hay muchas puertas cerradas, a la hora de mostrar un proyecto ya sea de danza, teatro, música, etc..muchas puertas se cierran en la cara de los artistas, y su necesidad, deseo, ganas e ilusión de creación y comunicación se ve frustrada. Y es quizás por eso, por lo que estos tres espacios quisieron apostar por la emergencia coreográfica y dar un espacio a nuevos y jóvenes creadores de la danza contemporánea.
Lucía M Herrera